(e)laboraciones sociales

historiar en clave de territorio, memoria y género / Colaboran: Graciela Fredianelli, Sabrina Bermúdez, Cintia Nin y GabrielaTejeda.

Esta clave recupera, en tiempos de pandemia, la propuesta de nuestro equipo de investigadores y docentes-extensionistas que es a la vez estrategia de enseñanza-aprendizaje y estrategia de producción de conocimientos y de intervención, con un sentido de servicio y de acción política, que propone llevar la Universidad a los territorios y los territorios a las aulas, tejer redes de relaciones con los actores sociales, y posicionar en el campo societal al Trabajo Social y la Facultad de Ciencias Sociales, como productora y articuladora de conocimientos, experiencias y saberes particulares.
Construir sinergia entre docencia, investigación y extensión, nos condujo a trabajar en un proyecto de extensión, para recuperar y visibilizar, el protagonismo de las mujeres en los procesos de luchas territoriales en tres barrios históricos de la ciudad de Córdoba: Alberdi, San Martín y San Vicente. La función extensionista se constituye en un espacio de intercambio de saberes entre la universidad y las instituciones y organizaciones sociales, con el potencial de fortalecer la trama de relaciones entre diferentes actores involucrados, y aportar en la construcción colectiva que protagonizaron y protagonizan las mujeres en las luchas territoriales, mediante dispositivos que habilitan instancias de intercambio, visibilización y producción; y en el mismo movimiento retroalimentar las propuestas y nutrir los espacios de formación y producción de conocimientos.

En esta clave entendemos con Beremblit a historiar como un proceso de producción de conocimientos que pretende reconstruir los eventos en los tiempos, pero que lo hace asumiendo que cualquier reconstrucción es hecha desde un punto de vista. Y en ese sentido, articulamos la configuración del campo profesional del Trabajo Social en las claves de historia-historia oral-memorias, territorios y géneros. Perspectivas que nos sirven de bisagra entre lo general y lo particular, el pasado y el presente, para el proceso de indagación territorial desde la mirada de las Ciencias Sociales en general y del Trabajo Social en particular.

La categoría “memoria”, como herramienta conceptual, guía la reconstrucción e interpretación del pasado desde el momento actual. Decimos con Halbwachs que "cada memoria individual es un punto de vista sobre la memoria colectiva, que este punto de vista cambia según el lugar que ocupa en ella y que este mismo lugar cambia según las relaciones que mantiene con otros entornos" (Halbwachs 2004:36). Así, en el proceso de reconstrucción del pasado a partir de fuentes orales, los recuerdos y relatos de les sujetos sacan a la luz las memorias individuales y reflejan la construcción colectiva de un pasado compartido. 

 

Nuestro desafío es encontrar las contradictorias y conflictivas articulaciones entre esas historias individuales, familiares, comunitarias, con la “vida cotidiana” en los contextos locales y rescatar los procesos que generaron resistencias, luchas, reivindicaciones, subversiones a los poderes hegemónicos. Los procesos de resistencias -históricos y actuales- de vecines y sus organizaciones ante la colonialidad, las dictaduras y el autoritarismo estatal, el neoliberalismo, la gentrificación, la profundización de vulneraciones en este contexto; y también las reivindicaciones étnicas, culturales, de mujeres/jóvenes/trabajadores/estudiantes/pueblos originarios, en estos territorios de la ciudad de Córdoba.

En esta reconstrucción de memorias, los silencios y olvidos ocupan un lugar central; olvidos que, por el propio proceso histórico son borrados, o que por voluntad y accionar activo deciden ser borrados (Jelin, 2001). Así, uno de los olvidos voluntarios han sido las memorias en clave de género, dejando en la subalternidad las voces de las mujeres y disidencias, como estrategia de opresión patriarcal y capitalista, dado que lo subalterno no solo es ubicado en una posición de quien no puede narrar, sino de quien carece de historia reconocible y plausible de ser narrada. 

Los procesos de reconstrucción histórica desde la memoria, y voz de les vecines, particularmente de las mujeres, evocando las resistencias y reivindicaciones producto de la acción colectiva y generadores de identidad, en clave comparativa y colaborativa, resulta una estrategia también de resistencia desde las prácticas de investigación interdisciplinarias. Hoy, el proceso de reconstrucción de las historias de los barrios problematiza y re-significa los procesos vividos en los territorios, en tiempo de pandemia y ASPO, en cuanto a los nuevos y persistentes problemas sociales, en cuanto a las diferentes respuestas y estrategias de cuidado que fueron gestando les actores sociales en cada territorio. 
El ASPO instituyó una nueva cotidianeidad con la incorporación de diversas tecnologías como mediadoras de las comunicaciones y relaciones. La intervención, la investigación y las prácticas educativas en nuestro caso nos desafiaron a entramar tecnologías, cuidados y docencia-investigación-extensión; y en esta clave intentamos acercarles a nuestras reflexiones, producciones y lecturas.